La investigación analiza las prácticas ancestrales de uso de abonos naturales y biocidas en la agricultura aymara de Puno-Perú. A través de un enfoque etnográfico, se documenta cómo las familias campesinas
emplean recursos orgánicos (como plantas, minerales y orina humana) para fertilizar los suelos y controlar plagas, preservando así la sostenibilidad agrícola y la sabiduría tradicional.