El documento “La Transición Hacia una Nueva Generación de Políticas Públicas para los Sistemas Agroalimentarios” aborda la necesidad de transformar las políticas públicas para los sistemas agroalimentarios en respuesta a un contexto global en constante cambio. Plantea tres dimensiones clave para el diseño de estas políticas: sostenibilidad ambiental, bioeconomía e integración de los sistemas alimentarios, priorizando enfoques basados en evidencia, inclusión social y gobernanza efectiva. Además, destaca la urgencia de adoptar estrategias que sean sistémicas, innovadoras y adaptables a los desafíos emergentes, como el cambio climático, la seguridad alimentaria y las oportunidades en servicios ambientales, todo ello enmarcado en una perspectiva de desarrollo sostenible y equitativo. El documento también resalta la importancia de adecuar la institucionalidad pública para garantizar una gobernanza transformadora. Esto implica reconfigurar los ministerios de agricultura y organismos afines para que asuman roles más estratégicos, incluyendo la planificación, coordinación intersectorial y provisión de bienes públicos. Asimismo, aboga por fortalecer la capacidad técnica y administrativa de estas instituciones, promoviendo una mayor articulación con actores privados y sociales, y asegurando que los sistemas agroalimentarios puedan responder a las complejidades del contexto actual de manera efectiva y resiliente.