El informe destaca el papel fundamental de la educación para enfrentar la crisis climática. Se establecen tres objetivos principales: 1) utilizar la educación para promover comportamientos pro-climáticos y la conciencia sobre el cambio climático, 2) desarrollar habilidades verdes en la educación terciaria para facilitar la transición hacia economías sostenibles, y 3) adaptar los sistemas educativos para hacerlos más resilientes frente a los efectos del cambio climático. Entre los hallazgos más significativos, el informe revela que solo el 1.5 % del financiamiento climático se destina a la educación, a pesar de su impacto potencial en la mitigación y adaptación al cambio climático. A nivel global, los sistemas educativos en los países de bajos ingresos pierden, en promedio, 18 días de clases anuales debido a eventos climáticos extremos, mientras que en los países de altos ingresos la pérdida es de aproximadamente 2.4 días. Además, el informe muestra que la educación no solo puede aumentar la conciencia, sino también catalizar cambios de comportamiento y fomentar habilidades prácticas que son esenciales para responder a los desafíos climáticos actuales.
Detalle del Recurso:
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AUTORES:
INSTITUCIONES:
IDIOMAS:
English
ÁREAS DE POLíTICA:
INSTRUMENTOS:
Estrategias, planes, políticas o lineamientos; sectoriales o nacionales
Inversión en infraestructura pública
PAíSES:
SECTORES:
Ciencia, tecnología e innovación
Medio ambiente y recursos naturales
RESULTADOS:
Formación de capacitadas técnicas
BENEFICIARIOS:
Sin beneficiarios
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