La Ley tiene como objetivo fomentar la producción y uso de bioenergéticos en México, promoviendo la diversificación energética y el desarrollo sustentable, mientras se apoya al sector rural. Establece bases para la producción de insumos para bioenergéticos a partir de actividades agropecuarias, forestales y biotecnológicas, asegurando que esto no comprometa la seguridad y soberanía alimentaria del país. También busca reducir las emisiones contaminantes, generar empleo y mejorar la calidad de vida, particularmente en áreas de alta marginalidad, mediante la coordinación entre los gobiernos federal, estatal y municipal, y la colaboración con los sectores social y privado. La ley crea la Comisión Intersecretarial para el Desarrollo de los Bioenergéticos, que coordina la planificación y ejecución de políticas en esta materia. La ley también regula aspectos como la emisión de permisos, sanciones por incumplimientos, y fomenta la creación de infraestructura para el desarrollo de la industria bioenergética en el país​.