Esta ley tiene como objetivo principal garantizar la identidad y pureza genética, calidad física, fisiológica y sanitaria de las semillas, así como regular su investigación, producción y comercialización en el país. La autoridad competente designada para la implementación y supervisión de esta ley es el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Entre sus funciones, el MAG debe incentivar la investigación y la producción de semillas certificadas, mantener un registro actualizado de productores y comerciantes de semillas, y verificar la calidad de las semillas importadas. Además, establece procesos de certificación de semillas para garantizar su calidad y define varias categorías de semillas, como semilla genética original, semilla básica o de fundación, semilla registrada y semilla certificada. Se incluyen regulaciones específicas para la importación, investigación y comercialización de semillas, asegurando que las semillas destinadas al comercio estén adecuadamente etiquetadas y que se cumplan estándares de calidad antes de su venta.